Amarre para el eterno amor con el poder y belleza de Venus
Buscas una pareja hasta e final de tus días. Entonces, es para ti este amarre para el eterno amor con el poder y belleza de Venus
Los planetas mueven sus influencias sobre nuestra personalidad a cada instante.
E indistintamente a los nacidos bajo su signo y a los demás en todo el zodiaco.
Pero aquí explicaremos en especial el poder y la belleza de Venus.
Cuando buscas amor en tu vida. Venus es la estrella de los amantes.
Y con un pequeño ritual mágico podemos retener a nuestro lado a la pareja ideal.
Marte nos predispone a la pelea, la guerra, defender lo que es nuestro.
Mercurio agudiza nuestro instinto, Júpiter nos otorga fortaleza y Saturno inteligencia…
Pero Venus… Venus nos ofrece amor.
La primera estrella en asomar y la ultima en desaparecer del firmamento.
Así, la más brillante, la única visible con solo levantar los ojos al cielo.
Para un ritual de amor eterno necesitas una noche de verano.
Estación en la que esta mágica estrella brilla con más fuerza sobre nosotros.
Y no habrá nada en el cielo que te impida observarla.
Deberás tener una cita romántica con el chico que desees para siempre.
Amarre para el eterno amor
Una cena deliciosa en un restauran campestre, con jardines.
Si fuera el caso que tuvieras un cóctel o una fiesta elegante como una boda.
Sería excelente, los trajes formales ayudan a recordar el momento.
Si logras tener uno de estos eventos en verano no dudes en llevar a tu pareja.
Espera a la media noche y busca el pretexto adecuado para que ambos salgan con una copa de champagne al aire fresco.
Identifica a Venus y habla de ella a tu ser amado, que él también pueda observarla.
Luego brinden a salud del amor y sellen el momento con un suave y sincero beso.
La estrella de los amantes brillará sobre la nueva relación.
Y la llenará de sensualidad y muchas otras cualidades que enriquezcan su noviazgo.
No dejes cada verano de observar a Venus con tu pareja y saludarla con un beso.
Confía en este conjuro para tener el amor que siempre soñaste.